
En relación a su ciclo de vida las mariposas monarcas nacen en huevos, de los que eclosionan en forma de larva, posteriormente se comen la cascara del huevo, para después alimentarse de plantas, hasta que engordan lo suficiente para convertirse en orugas. A continuación, crean una bolsa protectora que las rodea conforme entran en la fase de crisálida, de la cual saldrán a finales de verano. Son estas las mariposas que se dispondrán a realizar el largo proceso de migración desde México a Estados Unidos y viceversa. Se cree que realizan esta travesía buscando ambientes más cálidos. Es común que muchas de las mariposas no lleguen a su destino final, pero pueden tener descendientes durante el camino, los cuales continuaran el viaje, produciéndose en ciertas ocasiones que los individuos que llegan son la tercera generación con respecto a los individuos que inician el proceso migratorio.