La mariposa monarca (Danaus plexippus) es una de las más
conocidas de Norteamérica, aunque, también, podemos encontrarla en las Islas Canarias,
Azores, Madeira y un pequeño grupo en Europa Occidental. Estas mariposas presentan un patrón de colores naranja y
negro que nos permiten reconocerlas con facilidad, pudiendo, asimismo, diferenciar
fácilmente entre machos y hembras, las hembras tienen sus alas más oscuras y
las rayas negras son más gruesas que las de los organismos del sexo opuesto.
Los machos a su vez son ligeramente más grandes, tienen rayas más delgadas y se
puede observar que presentan un punto negro en cada una de las alas traseras,
los cuales liberan feromonas.
En relación a su ciclo de vida las mariposas monarcas nacen en huevos, de los que eclosionan en forma de larva, posteriormente se comen la cascara del huevo, para después alimentarse de plantas, hasta que engordan lo suficiente para convertirse en orugas. A continuación, crean una bolsa protectora que las rodea conforme entran en la fase de crisálida, de la cual saldrán a finales de verano. Son estas las mariposas que se dispondrán a realizar el largo proceso de migración desde México a Estados Unidos y viceversa. Se cree que realizan esta travesía buscando ambientes más cálidos. Es común que muchas de las mariposas no lleguen a su destino final, pero pueden tener descendientes durante el camino, los cuales continuaran el viaje, produciéndose en ciertas ocasiones que los individuos que llegan son la tercera generación con respecto a los individuos que inician el proceso migratorio.